El ser humano es un ser social que vive y se desarrolla en una sociedad específica, donde crea una cultura específica a través de actividades humanas que expresan lo material y lo espiritual. En la mayoría de los casos, las sociedades se caracterizan por su cultura y aportan identidad a los miembros de una sociedad específica. El elemento funcional de la cultura lo constituyen los hábitos, costumbres, tradiciones y tecnologías, entre otros.
La cultura es un factor de cambio social, cuya tendencia es el progreso. Cultura y cambio social son dos aspectos interrelacionados, ya que la cultura avanza junto al movimiento de las esferas de la vida social y de esta forma se va consolidando y convirtiendo en una fuerza social capaz de producir el cambio que abra pasos a nuevas culturas.
La cultura en la que vivimos induce al individualismo, es una cultura consumista, tradicional, superficial y basada en estereotipos. Es un modelo insostenible, puesto que se está desintegrando el sistema de valores que inspira y motiva a la sociedad industrial capitalista.
El desarrollo debe estar al servicio de la cultura y de la vida. Por eso, algunas iniciativas hacen que el Desarrollo Alternativo, centrado en el hombre, cobre fuerzas, aportando una nueva racionalidad y cultura social y económica, un uso distinto de la ciencia y la tecnología, nuevas concepciones sociales, sistemas de valores más humanizantes, un estilo de vida diferente...
La cultura es un factor de cambio social, cuya tendencia es el progreso. Cultura y cambio social son dos aspectos interrelacionados, ya que la cultura avanza junto al movimiento de las esferas de la vida social y de esta forma se va consolidando y convirtiendo en una fuerza social capaz de producir el cambio que abra pasos a nuevas culturas.
La cultura en la que vivimos induce al individualismo, es una cultura consumista, tradicional, superficial y basada en estereotipos. Es un modelo insostenible, puesto que se está desintegrando el sistema de valores que inspira y motiva a la sociedad industrial capitalista.
El desarrollo debe estar al servicio de la cultura y de la vida. Por eso, algunas iniciativas hacen que el Desarrollo Alternativo, centrado en el hombre, cobre fuerzas, aportando una nueva racionalidad y cultura social y económica, un uso distinto de la ciencia y la tecnología, nuevas concepciones sociales, sistemas de valores más humanizantes, un estilo de vida diferente...
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